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Alimentación sostenible, nutricion y cuidado del planeta 

  Conoce las implicaciones de la producción de comida, así como los desperdicios que produce en el medioambiente y los principios para vivir una alimentación más sostenible 

 

Sobras de comida compostables

 

El desperdicio de comida es uno de los retos más desafiantes para las sociedades actuales, en él convergen dos problemáticas que crecen a un ritmo cada vez más acelerado: la desnutrición y la lucha por el cuidado del medioambiente. 

En Colombia, por ejemplo, la cantidad de comida que se pierde es alarmante. Según datos del Departamento Nacional de Planeación (DNP) desde 2016 se desaprovechan anualmente aproximadamente 9,76 millones de toneladas de alimentos al año, equivalentes al 35 % de lo que se produce en total, lo que podría alimentar a cerca de 8 millones de personas en ese mismo periodo de tiempo.  

Pero en el mundo la cifra continúa siendo inquietante, según un artículo publicado en julio de 2021 por el Fondo Mundial para la Naturaleza (WWF por sus siglas en inglés) se pierde cerca del 40 % de la comida que se produce en total, lo que además representa el 10 % de las emisiones de gases efecto invernadero globales, sin mencionar los recursos que demanda la industria. 

Sobras de comida compostables

¿Cómo se ve la malnutrición en el mundo? 

Este panorama es aún menos alentador que lo mencionado anteriormente, las cifras de desnutrición aumentan, al tiempo que más personas padecen sobrepeso y obesidad en el mundo.

El estado de la seguridad alimentaria y la nutrición en el mundo 2022, un informe realizado por la Organización de las Naciones Unidas para la Alimentación y la Agricultura (FAO), el Fondo Internacional de Desarrollo Agrícola (FIDA), el Programa Mundial de Alimentos (PMA), la Organización Mundial de la Salud (OMS) y el Fondo de la ONU para la Infancia (UNICEF), destaca ampliamente el avance de la pobreza extrema y la creciente desnutrición crónica.

Allí se expone que, cerca de 820 millones de personas se acuestan con hambre cada noche, pues para ellos el acceso regular a alimentos nutritivos y suficientes es casi nulo. Alrededor de 40 millones de niños menores de 5 años tienen sobrepeso, mientras que se atribuyen 4 millones de muertes en el mundo a las enfermedades no transmisibles relacionadas con la dieta.

La desnutrición tiene un alto coste económico para todas las regiones del mundo y ni hablar de cómo afecta la salud de quienes sufren estos padecimientos. La mala alimentación es uno de los factores que contribuyen al aumento de la malnutrición en todas sus formas. Además, el seleccionar, preparar y consumir los alimentos de manera inadecuada puede desencadenar serios problemas y desgaste de los recursos naturales.   

Sobras de comida compostables   

Hablemos de alimentación sostenible  

Teniendo en cuenta lo que venimos hablando y el impacto medioambiental de los actuales sistemas alimentarios, es urgente promover dietas que sean saludables y más amigables con el planeta, con características socioculturalmente aceptables y económicamente accesibles para todos.

Los objetivos de las dietas saludables sostenibles son, en esencia:  

 

  • Lograr un crecimiento y desarrollo óptimos de todas las personas.
  • Apoyar el funcionamiento y el bienestar físico, mental y social en todas las etapas de la vida para las generaciones presentes y futuras.
  • Contribuir a prevenir todas las formas de malnutrición: la desnutrición, la carencia de micronutrientes, el sobrepeso y la obesidad
  • Reducir el riesgo de enfermedades no transmisibles relacionadas con la dieta.
  • Apoyar la preservación de la biodiversidad y la salud ambiental.

Las dietas saludables sostenibles deben combinar todas estas dimensiones de la sostenibilidad para evitar consecuencias no deseadas. ¿Cómo lograrlo?  

¿Cuáles son los principios de la alimentación sostenible?  

 

Sanitario  

  1. Iniciar la lactancia materna a una edad temprana, de forma exclusiva hasta los 6 meses de edad y combinada con una alimentación complementaria, hasta los 2 años o más.
  2. Basada en alimentos no procesados o mínimamente procesados, equilibrados en todos los grupos de alimentos y con restricción de productos altamente procesados.
  3. Incluye cereales integrales, legumbres, frutos secos y frutas y verduras en abundancia.
  4. Permite cantidades moderadas de productos de origen animal como: huevos, lácteos, aves de corral y pescado; y pequeñas cantidades de carne roja.
  5. Agua potable, segura y limpia como elemento indispensable.
  6. Consumo necesario, sin superar lo demandado por el cuerpo, de energía y nutrientes, en busca de una vida activa y saludable.
  7. Coherencia con las directrices de la OMS para reducir el riesgo de enfermedades no transmisibles relacionadas con la alimentación, en garantía de la salud y el bienestar de la población en general.
  8. Niveles mínimos, o ninguno si es posible, de patógenos, toxinas y otros agentes que pueden causar enfermedades transmitidas por la comida.

Ambiental  

 
  1. Disminuir las emisiones de gases de efecto invernadero, el uso del agua y la tierra, así como la contaminación química.
  2. Preservar la biodiversidad: cultivos, ganado, recursos derivados de los bosques acuáticos, evitando también la sobrepesca y la caza excesiva.
  3. Minimizar el uso de antibióticos y hormonas en la producción de alimentos.
  4. Evitar plásticos y materiales contaminantes en el envasado de alimentos.
  5. Reducir el desperdicio de alimentos.

Socio culturales  

 
  1. Basarse en prácticas culinarias, conocimientos y pautas de consumo, así como en las formas de producción de cada región.
  2. Accesibles y deseables.
  3. Tener en cuenta y evitar los impactos adversos relacionados con el género, especialmente en lo que respecta a la asignación de tiempo en procesos como compra y preparación de alimentos, entre otros.
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¿Cómo implementar la alimentación sostenible?  

La Organización de las Naciones Unidas para la Alimentación y la Agricultura (FAO por sus siglas en inglés), hace un trabajo constante de asociación con gobiernos y otras organizaciones internacionales para crear conciencia sobre los problemas mencionados, en busca de desarrollar políticas para reducirlos y mejorar el panorama a futuro. A pesar de la complejidad que parece poner en práctica una dieta sostenible, la clave en casa está en dar pequeños pasos para lograr grandes metas. Aunque se implementen medidas modestas, si se hace a escala mundial podrán tener grandes repercusiones en el impacto que generan. En este punto, caben destacar tres cambios importantes que se pueden introducir:   

Consumir menos: a pesar de que el hambre aumenta en el mundo, es cierto que el exceso de consumo es un problema importante en países desarrollados, que también crece a pasos agigantados en regiones en vía de desarrollo, lo que genera una demanda innecesaria de alimentos y gran impacto ambiental. Reducir los desperdicios: a lo largo de la cadena de producción se desperdician alimentos y los hogares son un foco importante a tener en cuenta para evitar el derroche de materias primas, mano de obra, energía y la producción de CO2. Más alimentos de origen vegetal: basar la alimentación en plantas es mucho más sostenible, se emplean muchos menos recursos y se reducen las emisiones de CO2. Elegir productos de origen animal más sostenibles o reducir su consumo también tiene repercusiones positivas en la salud y previene enfermedades no transmisibles.

Lograr una dieta sostenible requiere de algunos sacrificios, pero traerá grandes beneficios a corto plazo y garantizará recursos para las generaciones futuras. Recuerda siempre que debes consultar con tu médico y buscar alternativas que te motiven a disfrutar lo delicioso de la comida.   

Fuentes:

https://www.wwf.org.co/?368070/En-el-mundo-se-desperdician-mil-millones-de-toneladas-de-alimentos-mas-de-lo-que-se-estimaba

https://mrv.dnp.gov.co/Documentos%20de%20Interes/Perdida_y_Desperdicio_de_Alimentos_en_colombia.pdf

http://ieu.unal.edu.co/medios/noticias-del-ieu/item/mientras-2-7-millones-de-colombianos-sufren-hambre-10-millones-de-toneladas-de-alimentos-se-desperdician-anualmente

https://news.un.org/es/story/2022/07/1511372